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Columna Política «El Francotirador», Por José Cruz Delgado (31-VIII-2023).- Algo grave está pasando al interior del CEN del PRI, pues su líder Alejandro Moreno Cárdenas anunció su respaldo a Xóchitl Gálvez para encabezar el Frente Amplio por México abandonando a su suerte a Beatriz Paredes Rangel, y eso es grave porque podría suscitarse una ruptura interna y, si la tlaxcalteca lo decide pudiera darse una desbandada.
Fue muy apresurada y lamentable el anuncio que en días pasados realizó Alito, y si bien las encuestas no favorecen a Beatriz debió dejar correr el proceso hasta el final, ya que en ningún momento se dijo dispuesta a bajarse de la contienda para apoyar a Xóchilt Gálvez.
Fue una canallada la que le hizo Alito a Beatriz, una traición y una burla más a la militancia pero no es nada nuevo, Alito está acostumbrado a las traiciones.
Moreno Cárdenas dijo que con esta decisión de su partido fue con el fin de privilegiar la unidad y reducir el desgaste político, pero no, con traiciones, burlas y deslealtades no se construye la unidad.
Hasta el momento, doña Beatriz no ha dicho nada, y a lo mejor ni dirá, pero lo más seguro es que le quedará grabada en su corazón la traición de Alito.
Si bien las encuestas no la favorecían, debió ser ella quien tomara la decisión y no Alito, quien tomó una decisión unipersonal.
Los resultados de la última encuesta realizada se dieron a conocer la tarde del miércoles, por parte del Comité Organizador del Frente, donde Xóchitl Gálvez tiene un 59.4% de la aceptación, en tanto que Beatriz Paredes tiene un 40.6%, resultados que les fueron comunicadas a las dos aspirantes, pero Paredes Rangel no se le vio la intención de declinar y quiso llegar hasta el final, pero Alito no la dejo.
Los líderes de los comités estatales, como siempre, agachones y se inclinaron ante quien los impuso.
Nadie duda del liderazgo y capacidad de convocatoria de Xóchilt Gálvez, quien representa la esperanza de millones de mexicanas y mexicanos para sacar de Palacio Nacional al partido oficialista, pero insisto, no era la forma de obtener la candidatura presidencial, pero es la menos culpable de esta mancha en el proceso interno, sino Alito.
Ahora bien, si previo al anuncio de Alito, hubo una reunión con la ex precandidata, nadie sabe qué pasó, pero si hubiera estado de acuerdo en su declinación habría estado presente y ella misma habría dado una explicación al respecto, pero no estuvo, así que posiblemente no haya aceptado la propuesta de su claudicación.
Por lo pronto ya no habrá elección el próximo domingo.
Ahora hay que esperar cual será la reacción de Beatriz Paredes, pues esta fue su última oportunidad de ser candidata a la presidencia.
Alito debió ahorrarse las lisonjas hacia Beatriz, pues no creo que esté feliz por este desenlace fatal para ella, políticamente hablando.
