El Síndrome de Down

“Abórtalo y prueba de Nuevo”.  ¡Aun cuando tengas la decisión de hacerlo, sería inmoral traerlo al mundo!. 

En estos días se discute en forma muy acalorada un tweet de Richard Dawkins, desde luego que la discusión es por el internet. Este personaje, Richards, es un biólogo revolucionario a quien se le conoce también con el apodo de “el ateísta más famoso del mundo”, y me llama la atención su forma de pensar respecto a los niños con el Síndrome de Down y me mueve al escribir sobre este tema, tratando de acercarme a lo que ustedes pueden pensar al respecto.

Hace poco, accidentalmente observé a unos gemelos con este padecimiento o con este desarrollo diferente en un centro comercial de esta ciudad. Eran muy pequeños y creo que apenas estarían por cumplir un año. Confieso que al verlos y darme cuenta de su estado, lo que se me ocurrió pensar fue el trauma o padecimiento moral que tendría la mamá de los pequeños y sinceramente por este medio, observándolos, dentro de mi, internamente, exclamé “ah, son niños con síndrome de Down. “ah, su mamá, pobrecita. ¡Va a sufrir! y, por último, me quedé con la duda de si la mamá no sabía nada sobre la condición de sus hijos, si no hasta que nacieron;  o bien, decidió tenerlos aun sabiendo de la situación que tenían en su vientre. Ya con esta curiosidad personal, me puse a investigar lo elemental sobre el llamado “Síndrome de Down”.

Para mi sorpresa encontré que desde las 12 semanas de embarazo y a través de un examen de sangre y un ultrasonido de precisión se puede diagnosticar ese problema.

De hecho, no se conoce, por que no existen datos oficiales de la estadística sobre cuántas madres deciden tenerlos o abandonarlos después, al conocer el estado de salud de los bebes. Pero la verdad es que no son pocos, los encuentra uno con mucha frecuencia en la calle. caminando al lado de sus padres o abuelos. Así que pregunté a mis amigos y me dijeron que la mayoría de las madres, aun conociendo que sus bebes viene con ese síndrome deciden tenerlos. Entendiendo que México tiene una población muy católica y que ésta religión tiene una doctrina muy estricta sobre la vida que ayuda a la decisión de no abortar. Aun siendo católicas, creo que no es fácil tomar la determinación o de tener el hijo con esta deficiencia y sobre todo, por la vida tan corta relativamente que tienen.

Si analizamos esta misma situación en Corea, observamos que está permitido el aborto, pero  limitado en los bebes con algunas enfermedades contagiosas, o cuando se ha producido una violación, pero cuando es por Síndrome de Down un aborto sería ilegal.  Es distinto a México  y creo que se aplica en forma diferente en algunos estados. En Corea se aplica a todo país. Pero no obstante las leyes, se presentan muchos casos de aborto y la crítica social al respecto es increíblemente fría.

Se considera como excepción el aborto, cuando el feto presenta el Síndrome de Down. Y si lo anterior es una excepción es porque la gente conoce sabe cuán difícil es tener hijo con ésta debilidad. Por otra parte, hay que mencionar que en la sociedad coreana está obsesionada con la perfección y, desde luego, con la belleza. No obstante lo anterior, obviamente, existen programas del gobierno que dan apoyo a la comunidad Down y se toma como una ley aún cuando no está escrita.

En forma particular, me reservo mi opinión personal, pero primero está el respeto a la decisión personal de las que van a ser madres y saben cuál es la magnitud  complejidad de tener un hijo con esta característica. Siempre habrá que respetar la decisión de la madre sea cual sea, pero tengo una opinión personal al respecto. La Iglesia o la familia no deben participar en la decisión de la madre y por el contrario, obligadas están a respetar y ayudar sea cual sea la final determinación.