Finalmente el reconocimiento

Sorpresivamente le soy franco, fui descubriendo poco a poco el reconocimiento de un secretario de turismo de que la percepción de la inseguridad y la mala situación económica han sido dos factores que le han pegado directa y dramáticamente al sector de la industria sin chimeneas como nunca en la historia.

Me podrán platicar y podré vivir las maravillas virreinales que tiene Morelia, los más de 1500 espacios registrados como patrimonio cultural de la humanidad, el diseño estratégico que realizó el alarife Juan Ponce en 1541 al empezar a trazar lo que sería unos años después la ciudad de Valladolid, me presumirán cómo se gesto la primera conspiración contra la corona española en un edificio localizado sobre la calle real (Madero) y Morelos norte en 1809, me podrán decir también que la ideología insurgente nació en el antiguo seminario jesuita(Hoy Palacio Clavijero), en el legendario colegio de San Nicolás o en el seminario tridentino que destaca en la actualidad por ser la sede del palacio de gobierno, podré saber que el hombre que posteriormente llamarían Padre de la Patria dirigió hábilmente como un gran zorro el colegio de San Nicolás convertida hoy en nuestra máxima casa de estudios.

Me sentiré también muy orgulloso de saber que en esta tierra nació un hombre cuando esto era el Jardín de la Nueva España, que luego sentó las bases de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial en la Nueva España, es decir, que forjó el estado mexicano y se convertiría en el único generalísimo de nuestro ejército, nadie como el, un hombre que esta por encima de cualquier héroe o personaje de la historia de México según mi modesta opinión.

En un pasado reciente, que aún huele a pólvora me dirán también que en esta bendita tierra se consumó el primer atentado terrorista de la historia de México al arrojar dos granadas sobre la población en una noche que celebrábamos el “grito de independencia” y que ese vibrante grito se convirtió en un hilarante llanto que aún hace vibrar a aquellos que vivimos el momento.

Hoy mi tierra, vive el desencanto y el miedo se puede oler por la percepción de los hechos, como nunca las manifestaciones sociales son el pan de cada día, las inconformidades hacen eco en las calles, en las carreteras y en los medios de comunicación, particularmente los nacionales que paladean la noticia negativa y de conflicto que vende y llama la atención y hace ganar dinero.

Hoy no hay dinero para comprar los tiempos de publicidad y para la creación de campañas impactantes donde rebasen la fuerza de la negatividad.

Hoy Enrique Rivera Secretario de Turismo de Morelia me ha reconocido que estamos mal, que la percepción de inseguridad del turista nos ha pegado, que no hemos sido capaces de vender nuestro destino turísticamente hablando a los estados vecinos, a Colima,  Jalisco, Guanajuato, Querétaro, Estado de México, Distrito Federal y Guerrero, un mercado que supera los 40 millones de mexicanos, que buscamos en su momento de manera errada un mercado internacional que nunca llegó a pesar de diversos esfuerzos como hasta buscar la ayuda divina de una Papa y pregonar que miles de italianos arribarían como mariposas monarca en el oriente o como borregones en la Ciénega de Chapala o como tortugas en nuestras costas más que nunca vírgenes.

La realidad turística de Morelia se muestra con la caída dramática de visitantes, de la mala ocupación hotelera que ha provocado incluso el cierre de varios establecimientos, bueno…hasta los conductores de los tranvías turísticos como nunca denuncian una caída hasta del sesenta por ciento en el número de turistas que subían a sus unidades.

Hoy lo reconoce Enrique Rivera el secretario de Turismo, ignoro sí hoy mismo lo reprenderán por sus declaraciones, o mañana lo cesarán por no seguir el guión de que en Morelia NO PASA NADA cuando es la ciudad más peligrosa para vivir en Michoacán, donde la extorsión, los robos a casa habitación, los robos a vehículos, el secuestro, los homicidios son común denominador de una sociedad que clama que sus gobernantes ignoren el hecho y mejor lo reconozcan y trabajen en ello en conjunto con la sociedad.

En lo personal hoy el secretario de turismo me genera confianza, me hace sentir que es un ciudadano como yo y como usted que vive en una ciudad con problemas, pero que en donde juntos gobierno y sociedad podemos hacer la tarea, primero de generar las condiciones de seguridad, de mejorar la percepción, promover la creación de empleos bien remunerados y luego a gritarlo a todos los puntos cardinales, a nuestros vecinos, de boca en boca, utilizar a los medios y decir que vivimos en el Jardín de México, en la ciudad luz de América Latina (cuando Medellín en Colombia nos quitó el sitio desde hace mucho tiempo), decir que vivimos en la ciudad donde más festivales de calidad existen y que ni un sólo destello de inseguridad y violencia han reflejado.

Gritar que vivimos en una ciudad donde la sonrisa y la calidez es sinónimo de calidad en la atención al turista, gritar que Morelia es el destino cultural de México, gritar carajo! Que Morelia es el mejor lugar para visitar y vivir de México.

Articulista: Dr. Ignacio Martínez