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Por Víctor Ardura.-
Rodando viene pendiente abajo y no hay Sísifo que pueda detener el alud que se viene. Si los hechos desmientes a las palabras no hay mejor exponente que el Secretario de Gobierno, Jesús Reyna García. Después del espectacular operativo en el que participaron el Grupo de Operaciones Especiales y los esforzados muchachos de la Policía Federal, (sí, aquellos que transitan por la avenida Madero o por Camelinas, alto el rostro, marcial la expresión y con el gesto de ¡no pasarán!) El Secretario de Gobierno, orondo, afirma que no, que no es política de Gobierno el uso excesivo de la fuerza, que no son maneras usuales el que hayan entrado a agua y balas de plástico, con granadas de gases lacrimógeno, pero qué “lamentablemente se tuvo que hacer” y que se hará cuando sea necesario. Además y como dice el argot periodístico el encargado de la seguridad del interior del Estado fue más allá y dijo ante los medios que el Gobierno no tiene nada en contra de las Casas del Estudiante, siempre y cuando se demuestre que lo son: “nosotros las defendemos, somos los principales defensores de que podamos dar comida y sustento, pero a estudiantes, (¿Habrá que uniformarlos? ¿Ponerles tal vez en las ropas no la estrella de David sino el Escudo de la Universidad debidamente autorizado?)”.
Para poco menos de tres meses de gobierno, no está nada mal que la administración faustista haya asumido gallardamente las consecuencias de este desalojo, al parecer autorizado por el rector Salvador Jara Guerrero. Sí, porque en la rueda de prensa que ofreció el inefable Reyna García estuvo acompañado por Jara Guerrero, quien además enmendó la plana a quienes decían que hubo violación a la autonomía universitaria. “La Universidad no es una isla de impunidad”, dijo el rector, y adelantó que habrá una revisión de la Casa del Estudiante, albergues a los que la Universidad destinó el último año 140 millones de pesos.
Fue un buen cálculo de Vallejo Figueroa. Difícil saberlo. Hay un cierto hartazgo de la ciudadanía por los excesos de los estudiantes, de los muchachos que cierran calles y agreden a la gente. El bandalismo, pareciera haber consenso, no ayuda a ninguna causa y sí provoca reacciones de apoyo cuando la autoridad ejerce la fuerza pública y somete a quienes se pasan de la raya.
La Coordinadora de Universitarios en Lucha parece metida en un callejón sin salida. Ayer por la noche se negociaba en las oficinas del Bosque Cuauhtémoc una posible salida a este conflicto. Nuestros informes nos indican que hay una postura dura por parte del Gobierno del Estado y que habrá, al final de cuentas, muchachos procesados por diversos delitos. Como si no entendieran la lección ayer mismo, mientras se manifestaban en la avenida Madero en apoyo a sus compañeros, impidieron el paso de peregrinos que marchaban en celebración de la Señora de la Salud. Un sacerdote trató de convencer a los manifestantes de que permitieran el paso al camión que transportaba a la Santa, más fue inútil. Son intransigencias que en nada ayudan a que la ciudadanía comprenda la justeza de sus demandas.
Pero el alud viene rodando y rodando. Entre lo mucho que se dijo destaca una declaración del Gobernador Fausto Vallejo quien se quejó del abuso de “anfitrionía” de quienes no siendo michoacanos disfrutan los beneficios de la Casa del Estudiante. Y se pronunció a favor de una revisión a fondo de dichos albergues que benefician a más de 5 mil personas, (¿Se acuerdan ustedes de esa declaración suya, cuando presidente Municipal, que llamó advenedizos a quienes llevaban al centro a lavar sus vehículos?)
¿Es que está en puerta una reforma a dichas casas? Y surge otra pregunta: ¿Habrá pedido ayuda el rector al Gobierno del Estado para llevar a cabo dicha investigación lupa en mano?
Las primeras reacciones al operativo podríamos definirlas de empate. Un comunicado de prensa de la Sociedad Civil (SIC) apoya y felicita la actuación del Gobierno Estatal, pone sus barbas a remojar al decir que no están en contra de la libertad de manifestación siempre y cuando sea modocita, bien portada. Dicho comunicado lo firman organismos empresariales y organizaciones identificadas como conservadoras. Está por ahí el Consejo Coordinador Empresarial, CANACO Servitur, la Asociación Michoacana de Padres de Familia y siglas así.
¿Y qué sucede con la otra sociedad civil, la de la defensa de los derechos humanos, la que trabaja por las comunidades, los ambientalistas, los de diversidad sexual? Ellos seguramente tienen otra opinión y seguramente darán a conocer su punto de vista en estos días.
Lo cierto es que queda la impresión que no hubo la suficiente capacidad política para evitar llegar al desalojo y rescate de las unidades secuestradas mediante el uso de la fuerza pública. No se privilegió el diálogo sino que se optó de inmediato por la represión. Y mucho me temo que se aprovechó la estadía del Secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, para lograr no sólo su consentimiento sino la colaboración de la Policía Federal corporación que hizo posible mediante el uso del vehículo blindado conocido como “rinoceronte” el poder entrar a las Casas del Estudiante en donde estaban retenidos los vehículos oficiales.
Mal precedente y habrá que estar a la espera de lo que acontezca esta semana, si la CUL convocará la solidaridad de los normalistas, de organizaciones, de sindicatos. Si habrá consignados que es decir encarcelados cuántos y de qué manera, si se conocerá el paradero de quienes familiares reclaman su presencia, si esto ayuda a la imagen del Gobierno Estatal quien en tan sólo tres meses conflictos ha tenido con el sector estudiantil, con normalistas, y con los estudiantes que apoyan a CUL.
Y difícil panorama también para el rector Salvador Jara Guerrero. De veras se aventará la valentonada de meter orden en los albergues. El alud sigue cuesta abajo y nada ni nadie parece querer detenerlo.
Felipe reprobado
Cero. No pasa ni de panzazo. El Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa fue reprobado por tercera ocasión en su cuenta pública, la del 2008, e Poder Legislativo se metió a revisar a fondo el ejercicio del michoacano y al igual que el 2006 y 2007 y le dijo: ¡nones! tus cuentas no son claras. Hay muchas cosas que se deben explicar, y en el caso del 2008, destaca como si estuvieran escritas en letras mayúsculas y además en neón las muchas irregularidades que a su paso dejó la que entonces fuera la titular de la Secretaría de Educación y hoy flamante y amenazante candidata a la presidencia de la República, Josefina Vázquez Mota. ¿El asunto? Ese elefante blanco que se llamó Enciclomedia. Hay miles de millones de pesos bailando, sin justificación alguna, y los diputados, encabezados por el priista Alfonso Navarrete, ¡por supuesto!, fueron especialmente claridosos en este asunto.
Pero como las campañas y las propuestas no pasan por el necesario debate, sino que permite informar el duopolio televisivo y los medios de comunicación, el expediente sólo hizo ruido en algunos medios impresos con edición digital. Pero los levantacejas, los opinadores a troche y moche, hicieron mutis, guardaron silencio y actuaron como si la negativa del Poder Legislativo a autorizar la cuenta pública fuese un hecho menor.
Los diputados ya enviaron al Ejecutivo el análisis de dicha Cuenta Pública pues es su obligación publicarlo en el Diario Oficial de la Federación. Tremendo berrinche ha de haber hecho el moreliano y la pregunta es si cumplirá con su obligación de publicarlo.
De que se juega rudo…
Gastos de campaña
En esta semana también lo que destacó fue la querella que presentó la Coalición de Izquierda ante el IFE. ¿El motivo? Algo que ya había denunciado el candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador. Peña Nieto habría rebasado los topes de campaña fijados por la ley.
El equipo jurídico de la Coalición hizo su tarea a fondo. Con lupa en mano dio seguimiento a los espectaculares, a los spots televisivos, al traslado vía aérea por helicópteros, a los costosos regalos que se ofrece a la gente en los desolados mítines de Peña Nieto. Se pusieron la chaqueta de detectives y pidieron cotizaciones, costos, y todo ello en conjunto dio una cifra que en este momento está al mismo nivel que lo autorizado por el IFE.
No solamente piden al Consejo General del IFE que revise y sancione, sino que además se cancele la candidatura de Enrique Peña Nieto. Al cierre de esta columna no hay una respuesta oficial del IFE, aunque es previsible que los “Consejeros Ciudadanos” dirán que no, que no pasa. A eso añádase el ridículo esquema propuesto por el consejo para el debate, y entonces podríamos decir con justeza que el organismo encabezado por Leonardo Valdés Zurita superará las expectativas de opacidad y parcialidad de los tiempos de Carlos Ugalde como titular del Consejo. ¡Ah!, cómo se extraña la autoridad moral en el Consejo General del IFE de un José Woldenberg.
