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La obesidad un problema económico y social

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud, el índice de masa corporal (IMC) es un indicador simple de la relación entre el peso y la talla que se utiliza frecuentemente para identificar el sobrepeso y la obesidad en los adultos. Se calcula dividiendo el peso de una persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (kg/m2), de tal manera que si tú IMC es igual o superior a 25 determina sobrepeso, pero si tú IMC igual o superior a 30 determina obesidad.

Según este mismo organismos, hace diez años había 330 millones de adultos obesos en el mundo, para el 2005 llegó a los 400 millones, para el 2008 1,400 millones de adultos tenían sobrepeso, de los cuales, 500 millones de personas eran obesos y se estima que para el 2015 habrá 2,300 millones de personas con sobrepeso y 700 millones con obesidad, estamos hablando del 42% de la población mundial, lo que resulta un severo problema de salud pública que va cada día en aumento.

Se consideraba que el problema de la obesidad sólo se presenta en los países desarrollados o industrializados un ejemplo es Estados Unidos, pero resulta que en los países pobres y en las zonas urbanas se está presentando éste fenómeno sorprendentemente.

México es considerado el país con más obesos en el mundo pasando de una población de 59.7% en el año 2000 a 66.7% en el 2006 y la obesidad sigue, sigue y sigue.

Ésta enfermedad está generando los primeros lugares de morbilidad y mortalidad, padeciendo enfermedades como diabetes mellitus, hipertensión arterial, alteraciones pulmonares y cardiovasculares, infertilidad, entre otros. También genera el desarrollo de varios tipos de cáncer, así como también una afecta la esfera psicológica de quién padece la obesidad, disminuyendo su autoestima y las relaciones sociales.

La obesidad es un problema que no discrimina raza, sexo, edad, nivel económico, status social, y quizás hay variables como el nivel de ingreso, el sedentarismo, el exceso de televisión o videojuegos, la nula actividad física, la genética, herencia, uso indiscriminado de alimentos industrializados, el avance tecnológico, mala nutrición, exceso de alimentos ricos en grasa y carbohidratos, no hay conciencia, entre otros que son causas generadoras de obesidad, como también hay factores psicológicos como ser hijo único o sobreprotegido, los conflictos familiares, la separación de los padres, el fallecimiento de alguno de ellos, cambios en su vida escolar o de familia, o sea que se presentan diferentes trastornos como ansiedad, culpa, depresión y frustración que conduce al aumento de alimentos.

México ocupa el primer lugar mundial en obesidad infantil, y el segundo en obesidad en adultos, precedido sólo por los Estados Unidos. Nuestros niños y niñas obesos representan el 2006 el 26%, es decir 4.1 millones, para el 2010 40 millones de niños menores de 5 años con problemas de obesidad. Nuestro país se encuentra en una contradicción; desnutrición en el sur y obesidad en el norte del país e incluso ambas situaciones conviviendo en una misma región.

Hoy el sobrepeso y la obesidad son el quinto facto principal de riesgo de muerte en el mundo, cada año fallecen 2.8 millones de personas adultas consecuencia de ésta enfermedad silenciosa.

Sin duda que urgen políticas de atención y prevención al problema del sobrepeso y obesidad por parte del gobierno, el compromiso y conciencia de la industria alimentaria, pero también es un asunto de responsabilidad individual y social.

Urge la concurrencia de recursos, proyectos, ideas, esfuerzos de todos los actores sociales, económicos y políticos para concientizar y atender el problema porque representa un alto costo social y económico para las familias y los gobiernos, ya no es un problema individual ahora es un problema de salud pública que se tiene que atender, porque como vemos la obesidad sigue aumentando y con ello las enfermedades, de tal manera que tendremos una población con una mala calidad de vida.

El sobrepeso y la obesidad requieren de una política tanto preventiva como correctiva, ya que es causa – efecto. La pobreza está ligada a la obesidad, ya que son éstos hogares los que más consumen productos ricos en calorías y carbohidratos.

Habrá que incorporarlo en la currícula educativa del nivel básico, el sector salud lo considere como tema prioritario ya que es la causa de otras enfermedades, el área económica debe regular la producción de productos bajos en calorías y carbohidratos, legislar la producción, promoción y consumo de productos chatarra, entre otras medidas.

La obesidad una enfermedad silenciosa que ha ido en aumento y puede convertirse en la principal causa de muerte, atendámosla, es un compromiso de todos.

Articulista:Patricia Flores Anguiano

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