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Reforma.- Andrés Manuel López Obrador, candidato del Movimiento Progresista, presentó un decálogo energético en el que, además de reiterar que su Gobierno no privatizará Petróleos Mexicanos, dio la ubicación de las cinco refinerías que construiría durante su sexenio.
Tres de las refinerías que piensa construir López Obrador estarían en Tula, Hidalgo; Salamanca, Guanajuato; y Salina Cruz, Oaxaca, puntos donde Pemex ya tiene refinerías.
Las otras dos estarían ubicadas en Dos Bocas, Tabasco, y en Atasta, Campeche.
«Vamos a dejar de exportar eventualmente petróleo crudo y se procesará toda la materia prima para darle valor agregado y generar empleos en el País», afirmó el candidato de la coalición PRD-PT-MC.
Con lo que se ahorraría en un año por el flete de los 500 mil barriles diarios que se importan de gasolina, un aproximado de 80 mil millones de pesos al año, podría financiarse la construcción de una de las refinerías, afirmó el candidato de las izquierdas.
El decálogo incluye una nueva política para la Comisión Federal de Electricidad, empresa que operará a toda su capacidad las termoeléctricas del País para dejar de comprar energía a empresas extranjeras.
Los 10 puntos
-Manejo integral de todo el sector energético
-Priorizar la inversión en la exploración de yacimientos
-Dejar de exportar gradualmente petróleo crudo
-Construir cinco grandes refinerías
-Frenar el deterioro de la industria petroquímica
-Operar a toda su capacidad las termoeléctricas de la Comisión Federal de Electricidad
-Comprar el 80 por ciento de los insumos para el sector energético a empresas nacionales
-Aportar el dinero suficiente para la investigación y el desarrollo tecnológico en el sector
-Crear un programa nacional de transición energética para no depender de los combustibles fósiles
-Limpiar a Pemex y a la CFE de corrupción y así financiar la inversión que el sector demanda
