La noche de un día dificil

Por Víctor Ardura.-

En verdad os digo que el Apocalipsis tiene cara de estudiante y que un rey sitiado es tanto como una moneda de uso caduco. Y es que en esta entidad de lagos y montañas de bosques y cárteles, al nuevo virrey le han saltado frentes estudiantiles por todos lados, de tal modo, de tal suerte, que no sabría por dónde empezar a deshacer en tuertos. Y en verdad os narro que el asunto de los diez estudiantes detenidos, maravilla de la exageración en un penal de máxima seguridad, ha llegado al corazón del país, al Zócalo capitalino en donde jóvenes defeños exigen su inmediata liberación. Es más: en las fojas del expediente, la relatoría bárbara del garrote entendido como herramienta de disuasión, pasará a la Cámara de diputados en donde los legisladores de la izquierda exigirán lo mismo que la Coordinadora de Estudiantes. Día de estire y afloja de varios frentes, ¡oh sorpresa! estudiantiles.

En el tramo carretero que comunica a Sevina con Pichátaro, estudiantes, padres de familia, y autoridades comunales de Cherán hicieron causa común para bloquear el tránsito y al momento de redactar la presente llevan ya ocho horas sin que permitan ni la entrada ni la salida. Y es que no quieren al rector Hugo Rodríguez Uribe, personaje del que exigen su destitución, y demandan, exigen, piden, solicitan al gobierno del estado que se les brinde de servicios básicos, el registro de tres de las cinco licenciaturas, registro de los reglamentos universitarios: titulación y servicio social, atención médica, laboratorios, apoyos a la salida de prácticas de campo y la instalación de la Rectoría dentro de las instalaciones universitarias en campus kanaguio (¡Oh Plan Estatal de Desarrollo cuánto te extrañamos!)

Más allá, digamos que en el otro extremo, estudiantes de Cherán y de Tiripetío plantaron en barricadas en Xangari una pipa y vehículos de transporte público secuestrados. Los muchachos están en pie de guerra pues resulta, oh caros lectores, que al pasar por ahí un convoy de la policía estatal se apostaron echando armas a sus fierros, en este caso a sus palos, como queriendo pelear. Y en verdad os afirmo que si este panorama caótico no bastara, el Virrey Vallejo Figueroa, dejadas a un lado la armadura y la lanza, púsose a negociar con la Coordinadora de Universitarios en Lucha y, en el uso de un lenguaje un tanto esotérico, abrió la posibilidad de que los diez estudiantes presos salgan libres cuando un día antes había dicho que con la ley no se negocia. El Secretario de Gobierno, Jesús Reyna García, hizo discreto mutis, es decir, se negó a hablar del asunto ante los aguerridos reporteros.

Y como si la crónica de esta crisis anunciada no bastara, el cada vez más disminuido Rector Salvador Jara Guerrero, en rueda de prensa tempranera no dijo que sí ni no, ni si los muchachos detenidos serán sometidos a juicio universitario. Soltadas las instalaciones, el que estén libres y en uso depende de los acuerdo con que la CUL llegue con el Gobierno el Estado. Frentes vemos, intensiones no sabemos. Quiero que quede como información sin fuente fidedigna, pero se dice, se menciona, se arriesga la versión de que la quema de vehículos en días pasados, que la ejecutoria del vandalismo público, fue de la autoría de la Casa del Estudiante propriistas, léase Espartaco. Los documentos, los videos, las pruebas serán publicadas próximamente en una revista de circulación nacional cuyas fuentes son, como dice el argot, altamente confiables…