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Columna Política «Diputado 501», Por Antonio Tenorio ADAME (18-XII-2023).- Al inaugurar el primer tramo del Tren Maya, cuyo recorrido comprende de Campeche a Cancún, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que se trata de un hecho histórico, luego de que “en más de 100 años se mantuvo en el olvido al sureste mexicano”.
Los viajeros que acompañaban al Jefe de Gobierno eran: gobernadores, Ken Salazar, embajador de Estados Unidos; los principales empresarios del país, entre ellos, Carlos Slim, Francisco Cervantes y Carlos Hank González.
Posicionamiento de Minoría opositora
La poesía velardiana de la mexicanidad cantó a la patria, “el tren va por la vía
como aguinaldo de juguetería”, el tiempo y el espacio evocándoles se describen en vísperas de posadas y cambios en la composición, ocupación y uso del territorio nacional.
Aunque el Tren Maya ha sido criticado desde distintas vertientes de estudio por su daño
ecológico, dado que sus efectos de destrucción amenazan el entorno ambiental tanto de superficie como subsuelo, en uno altera el medio ambiente, en otro se afecta la corriente del río subterráneo más importante del mundo, como dirime el Instituto de Estudios Maya, UNAM.
Esta obra de comunicación tiene repercusiones sociales de diverso orden, una de ellas es la búsqueda de la recomposición de la matriz territorial de desarrollo en el sentido de la concentración del grado de industrialización que ahora se orienta al norte, al través del altiplano hasta la frontera con los Estados
Unidos.
La ocupación territorial de la Nueva España, estuvo condicionada a la explotación de los minerales preciosos, oro y plata, y su exportación a Europa, por lo que la
ubicación de los centros demográficos se esparcieron del Camino de Santa Fé que partía de Nuevo México y recorría las Mesetas centrales para caer a la capital del país seguir a Puebla y concluir en Veracruz. Por eso el atraso de ocupar las costas.
Después de la Segunda Guerra Mundial se operó otro esquema demográfico con el intercambio comercial y la migración que se dirigía a la nueva metrópoli: los Estados Unidos. Así el sentido del
desarrollo se revirtió e intensificó del centro del país al Bajío para después expandirse en todo lo largo de la frontera norte.
La intención de concentrar la inversión pública en la región sur-este del
territorio nacional con la localización de la refinería Dos Bocas, el Corredor
transístmico y el Tren Maya ha sido a favor de establecer el equilibrio con
relación a las regiones más desarrolladas del país. El sentido de crecimiento obedece a las formas de explotación y aprovechamiento de los recursos naturales y áreas
de demandas del mercado.
Se trata de evitar la desigualdad entre las regiones del país, con el grave perjuicio de ir a la confrontación entre mexicanos de primera y los de segunda, donde
anidan los conflictos de rivalidad más allá de la competencia, cuyo fin desemboca en el separatismo, la regionalización competitiva y excluyente.
La desigualdad regional pone en riesgo la unidad nacional, en nuestro caso, es mayor con la zona sur pacífico formada por los estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, donde los índices de pobreza son mayores.
Entre los motivos por los que la región más amplia integrada por Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán ha sido beneficiada, con las obras prioritarias de la administración federal.
De acuerdo con el informe del Banco de México, (Banxico), de las cuatro zonas con las que se divide el país, y analizada la actividad de cada una de ellas, la correspondiente al sur del país encabezó el crecimiento en el periodo de julio a septiembre del 2023, con un incremento del 4.7% anual.
La región Sur registra el mayor dinamismo del país bajo el impulso de la construcción, su industria alimenticia, así como una recuperación del sector comercios y servicios, específicamente con el turismo.
Los comentarios en los medios (El Economista) subrayan que: ni el
fenómeno de la relocalización, o mejor conocido como nearshoring, incidió para que las regiones crecieran más.
De hecho, la segunda región cuya economía en incrementos fue el centro norte con 3.3% anual, seguida del norte con 3.2% anual, mientras que el centro quedó en último lugar con 2.9% anual, como demuestran cifras proporcionados por Banxico.
Resulta necesario destacar el problema de la desigualdad regional a favor de suprimir las exclusiones sociales, como ocurre en el sur de México. De acuerdo con las cifras de Coneval, los estados del Pacífico sur son los más castigados por la desigualdad se recrudece; Coneval confiere Chiapas, Oaxaca y Guerrero habitan más del 30 por ciento de mexicanos en extrema pobreza.
Por su parte, el INEGI señala que en México existen 7.3 millones de indígenas, los que se esparcen en el territorio de Guerrero, Oaxaca y Yucatán en términos del 42.6 por ciento como culturas originarias, cuyas atenciones
sociales se han visto rezagadas.
La región Sur Pacífico representa una población de 11 millones 987 mil 310 habitantes, equivalente al 10 por ciento de la población nacional. Esta Región es recipiendaria del 11.2 por ciento de las participaciones nacionales, una relación similar al tamaño poblacional, es decir no existen transferencias que promuevan la inversión pública destinadas a la infraestructura para el desarrollo.
En este contexto donde la zona del país que históricamente ha presentado los niveles más elevados de marginación es la del Pacífico sur. Con
el sur se está cumpliendo la premisa de que sí se puede lograr el crecimiento y
desarrollo económico, aseguró el Banco de México (Banxico) en el Reporte sobre las economías regionales.
Por ello, es inaplazable el cambio de estrategia de desarrollo para compensar, y alentar el impulso económico del Sureste debe incluir al Sur Pacífico, para terminar de cerrar el círculo de incorporar a las regiones rezagadas del país.
PROMULGUESE DECRETO DE LEY
El Tren Maya como las otras obras prioritarias disponen del plus de favorecer el equilibrio regional del gasto público federal, con el
significado de impulsar la igualdad social de los mexicanos y la seguridad de la integración de su territorio.
