Columna Política «Repercusiones», Por Samuel Maldonado Bautista (30-I-17).- El Donald Duck, recientemente empoderado en la jefatura del gobierno del po-deroso vecino, dio inició prácticamente a sus labores administrativas y políticos tratando de espantar a su homólogo mexicano, con la amenaza de la construcción de un muro en la frontera que ambos países tienen en común. La amenaza va acompañada del pago correspondiente , quiéralo o no, nuestro país.
A pocos días de iniciada las labores de este excepcional sujeto, deja más en claro una agresividad constante y manifiesta su perversidad o criminalidad a través de un comportamiento a todas luces inmoral. Su personalidad es antipática; es en sí, un enfermo mental, que no da confianza e imposible de sentir empatía hacia él. A pocos días de iniciado su mandato, ha sido abucheado constantemente por su descaro y desvergüenza.
Sin temor a equivocarnos, podríamos definirlo como un psicópata o enfermo mental, ajeno a experimentar remordimientos de cualquier tipo. Sus tristes experiencias para manosear a diferentes mujeres abusando de su posición económica y ahora política, es verdaderamente lamentable. Otra característica de este personaje, es la de interactuar o tratar a sus semejantes como simples objetos despreciables o impersonales.
En la otra parte de la moneda, es decir, en nuestro país, tenemos por desgracia a un timorato que se espanta hasta con los gritos de algunos estudiantes que lo hace esconderse ante los problemas detal de tal manera que su torpeza como líder, le ha causado a México, pena tanto en nuestro país como en el extranjero.
Ante el escenario que se prevé, el archimillonario empresario Carlos Slim, nos dibuja con palabras el retrato completo de nuestro poderoso vecino que ha puesto en ridículo a nuestro gobernante, indicando prácticamente que no se le tenga miedo, pues solo es un comerciante, negociador, pero de ninguna manera unterminator, aun cuando nos de esa idea de malvado, asegurando el mismo Slim, que las mejores “bardas por construir” son las inversiones, activando nuestra economía y potenciando nuestro mercado interno.
Agregaría a los decires de don Carlos, que robando menos y trabajando más veríamos mejores resultados, que elevando los precios de los combustibles y manteniendo una larga lista de elementos inútiles en los puestos administrativos y políticos en México.
Desafortunadamente ¡Peña Nieto no es un rival para Trump! Le falta ingenio, madurez, audacia y sobre todo le sobra el miedo y en esta guerra se requiere de… enjundia. Para el mundo en lo general, Peña Nieto no es rival, ante el torvo Hitler redivivo, nacido en el viejo mundo muy cerca de Alemania.
En esta guerrita de “muros”, le surge a Trump un manager adicional en la figura de Netanyahu y si a este gringo le urge construirla, que lo haga y ya entenderá de sus sin razones cuando en el infierno musulmán se encuentre.
Recordemos que el muro de Berlín fue construido para luego derrumbarlo, dejando así abiertas las puertas de tal forma que los hermanos separados por la estupidez y capricho de los gobernantes, se pudieran abrazar fraternalmente.
Ahora el pequeño Netanyahu saluda y felicita a Trump por su gran ingenio para separar -muros de por medio- a los hermanos.
¡No queremos muros como el de Israel, que por lo mismo, por abuso y apoyado permanentemente por Inglaterra y los EE.UU., mantiene en esos orientes diferentes guerras entre hermanos. Guerras estúpidas, que han desperdiciado miles y miles de millones de dólares en una matanza permanente que verdaderamente da vergüenza internacional.