11 de julio del 2025.- El Departamento de Estado de Estados Unidos ha comenzado el despido masivo de más de 1.350 empleados con base en el país, como parte de una ambiciosa y polémica reestructuración promovida por la Administración del presidente Donald Trump.

Según una comunicación interna del Departamento de Estado, los despidos afectarán a 1.107 empleados del servicio civil y a 246 oficiales del servicio exterior. «El Departamento está reorganizando sus operaciones domésticas para enfocarse en prioridades diplomáticas», señala la nota interna. «Las reducciones de personal han sido diseñadas cuidadosamente para impactar funciones no esenciales, oficinas duplicadas o redundantes, y aquellas donde se pueden lograr eficiencias considerables», destaca.
La decisión ha marcado el primer paso del proyecto de Trump para alinear la política exterior del país con su agenda de «Estados Unidos primero». Sin embargo, antiguos diplomáticos han advertido que la salida de oficiales del servicio exterior podría dejar al país vulnerable frente al creciente poderío de China y Rusia.
A este respecto, el AFSA, organización sindical y profesional que agrupa a diplomáticos y funcionarios de carrera del Departamento de Estado, ha emitido un comunicado donde se opone «rotundamente» a lo que ve como el desmantelamiento de una «fuerza diplomática de primera línea» en medio de un «momento de gran inestabilidad mundial».
Una reforma a la medida de Trump
En febrero, Trump ordenó al secretario de Estado, Marco Rubio, que reformara el servicio exterior para garantizar la ejecución fiel de su política exterior. Además, reafirmó su promesa de «limpiar el Estado profundo» despidiendo a burócratas considerados desleales o que se volvieron en su contra tras su salida de la Casa Blanca.
La reestructuración también forma parte de una ambiciosa estrategia de Trump para reducir el tamaño del Gobierno federal y eliminar lo que califica como gasto innecesario de los contribuyentes.
«Heredamos una dinámica que necesitaba reformas, y las estamos implementando», explicó el jueves a la prensa la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, quien insistió en que la Administración cree en una política exterior que prioriza los intereses de Estados Unidos.
Aunque se esperaba que el proceso concluyera para el 1 de julio, fue postergado debido a litigios en curso. El Departamento de Estado aguardaba una decisión de la Corte Suprema sobre la legalidad de dichos despidos masivos.
El martes, la Corte allanó el camino para que la Administración Trump continuara con los recortes de empleos y la drástica reducción de numerosas agencias. Esta decisión podría llevar a decenas de miles de despidos adicionales.