Ahuizote Agencia de Información Ahuizote.com
31 de julio del 2025.- Un total de 14 países occidentales, incluidos Reino Unido, Estados Unidos, Francia y Alemania, han emitido este jueves una condena conjunta contra lo que han calificado como una creciente ola de operaciones ilegales por parte de los servicios de inteligencia iraníes en Europa y América del Norte.
Los gobiernos han acusado a Teherán de estar detrás de intentos sistemáticos de «asesinatos, secuestros y hostigamiento» contra ciudadanos y residentes considerados enemigos del régimen.
«Estamos unidos en nuestra oposición a los intentos de los servicios de inteligencia iraníes de matar, secuestrar y acosar a personas en Europa y América del Norte, en clara violación de nuestra soberanía», ha señalado la declaración conjunta.
El documento ha estado firmado por los gobiernos de Albania, Austria, Bélgica, Canadá, Chequia, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Países Bajos, España, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos.
Los firmantes han exigido que Irán «ponga fin de inmediato a estas actividades ilegales», que, según alertan, se están llevando a cabo cada vez más en colaboración con redes criminales internacionales.
Reino Unido denuncia 20 complots iraníes contra su territorio
Según el Gobierno de Londres, desde principios de 2022 se han desbaratado «más de 20 complots iraníes» vinculados a intentos de secuestro o asesinato en territorio británico, con objetivos que incluyen tanto a ciudadanos británicos como a disidentes iraníes exiliados. Estados Unidos, Alemania y Francia también han detectado operaciones similares en sus territorios.
En octubre pasado, una investigación de Reuters reveló una campaña coordinada de atentados y secuestros planeada desde Teherán, con blancos identificados en Europa y EE.UU., entre ellos periodistas, activistas, y miembros de la diáspora iraní. Los planes frustrados, según fuentes de inteligencia, estaban destinados a silenciar voces críticas y a enviar un mensaje de impunidad.
Ante esta amenaza persistente, Reino Unido anunció en marzo una nueva legislación que «obligará a representantes del Estado iraní a registrar todas sus actividades de influencia política en Reino Unido», una medida destinada a aumentar la transparencia y limitar la injerencia extranjera.
El patrón no es nuevo, pero preocupa su escala actual. Irán ha sido acusado repetidamente de operar fuera de sus fronteras para perseguir a sus opositores. La declaración marca una coordinación sin precedentes entre gobiernos occidentales para denunciar públicamente esta campaña clandestina. Por ahora, Irán no ha respondido oficialmente a las acusaciones.
