22 de junio del 2025.- Estados Unidos ha puesto fin a 45 años de diplomacia al entrar en la guerra de Israel contra Irán con el bombardeo de las tres principales instalaciones del programa nuclear iraní (Isfahán, Natanz y Fordow). En un ataque sorpresa y sin precedentes, Washington ha disparado al corazón del programa nuclear iraní y ha amenazado con más ataques «si la paz no llega rápido». En redes sociales, el presidente, Donald Trump, ha anunciado la operación de madrugada pese a que el jueves dijo que se tomaría «dos semanas» para pensar qué hacer respecto a la posibilidad de una intervención directa en Irán.

«Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra las tres instalaciones nucleares de Irán, incluyendo Fordow, Natanz e Isfahán. Todos los aviones se encuentran ahora fuera del espacio aéreo iraní», ha señalado Trump en su cuenta de Truth Social. Ha dicho que contra Fordow se ha lanzado una «carga completa de bombas». Los aviones estadounidenses ya están de vuelta en el país, según el presidente, que ha seguido las operaciones desde el centro de operaciones de la Casa Blanca.
El mandatario estadounidense ha calificado los ataques como «un éxito militar espectacular» y ha afirmado que las instalaciones clave de enriquecimiento nuclear de Irán han sido «completamente y totalmente volatilizadas». Ya en su comparecencia desde la Casa Blanca, Trump ha asegurado que el objetivo de la ofensiva era «la destrucción de la capacidad nuclear de Irán» y frenar la amenaza que, según él, representa el «principal estado patrocinador del terrorismo en el mundo».
«Habrá o paz o tragedia para Irán, mucho más de lo que hemos vivido durante los últimos ocho días […]. Si la paz no llega rápidamente, vamos a buscar esos otros objetivos con precisión, velocidad y habilidad», ha advertido. Además, ha agradecido al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por colaborar «como un equipo, como tal vez ningún equipo ha trabajado antes».
Estados Unidos ha puesto fin a 45 años de diplomacia al entrar en la guerra de Israel contra Irán con el bombardeo de las tres principales instalaciones del programa nuclear iraní (Isfahán, Natanz y Fordow). En un ataque sorpresa y sin precedentes, Washington ha disparado al corazón del programa nuclear iraní y ha amenazado con más ataques «si la paz no llega rápido». En redes sociales, el presidente, Donald Trump, ha anunciado la operación de madrugada pese a que el jueves dijo que se tomaría «dos semanas» para pensar qué hacer respecto a la posibilidad de una intervención directa en Irán.
«Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra las tres instalaciones nucleares de Irán, incluyendo Fordow, Natanz e Isfahán. Todos los aviones se encuentran ahora fuera del espacio aéreo iraní», ha señalado Trump en su cuenta de Truth Social. Ha dicho que contra Fordow se ha lanzado una «carga completa de bombas». Los aviones estadounidenses ya están de vuelta en el país, según el presidente, que ha seguido las operaciones desde el centro de operaciones de la Casa Blanca.
El mandatario estadounidense ha calificado los ataques como «un éxito militar espectacular» y ha afirmado que las instalaciones clave de enriquecimiento nuclear de Irán han sido «completamente y totalmente volatilizadas». Ya en su comparecencia desde la Casa Blanca, Trump ha asegurado que el objetivo de la ofensiva era «la destrucción de la capacidad nuclear de Irán» y frenar la amenaza que, según él, representa el «principal estado patrocinador del terrorismo en el mundo».
«Habrá o paz o tragedia para Irán, mucho más de lo que hemos vivido durante los últimos ocho días […]. Si la paz no llega rápidamente, vamos a buscar esos otros objetivos con precisión, velocidad y habilidad», ha advertido. Además, ha agradecido al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por colaborar «como un equipo, como tal vez ningún equipo ha trabajado antes».
EE.UU. amenaza a Irán con nuevos ataques si no llega a la paz – Fin de semana 24h | Verreproducir video01.22 minComparecencia completa de Trump con el anuncio del ataque a Irán
En la operación ‘Martillo de medianoche’, Estados Unidos ha utilizado entre cinco y seis bombas antibúnker lanzadas desde bombarderos B-2 en su ataque. Además, han disparado dos docenas de misiles Tomahawk desde unos 640 kilómetros de distancia a bordo de submarinos y destructores, según ha informado el Pentágono en rueda de prensa. Según fuentes citadas por Fox News, Fordow «fue completamente destruida», y Trump ha respaldado esta información al republicar que «Fordow ha desaparecido».
Irán se reserva «todas las opciones» para defenderse
La respuesta de Irán no ha tardado en llegar: ha asegurado que se reserva «todas las opciones» para defenderse y ha advertido que tendrán «consecuencias duraderas». El jefe de la diplomacia iraní, Abás Araqchí, que ha calificado de «indignantes» los ataques, ha señalado que Estados Unidos ha cometido una grave violación de la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y el Tratado sobre la No Proliferación Nuclear (TNP) al «atacar las instalaciones nucleares pacíficas de Irán” como miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas».
Autoridades locales de la provincia de Qom han confirmado que parte de la planta nuclear de Fordow fue alcanzada tras detectarse «objetivos hostiles». Sin embargo, desde Teherán han restado importancia al impacto. «El lugar lleva mucho tiempo evacuado y no ha sufrido daños irreversibles […] El conocimiento no se puede bombardear”, ha declarado Mehdi Mohammadi, asesor parlamentario.
Irán, que ha negado reiteradamente estar desarrollando armamento nuclear, ha afirmado no haber detectado «ningún signo de contaminación» nuclear tras los ataques estadounidenses. «No hay ningún peligro para las personas que viven alrededor de los sitios» de Fordow, Natanz e Isfahán, ha declarado el Centro Nacional del Sistema de Seguridad Nuclear. También la Comisión Saudí de Regulación Nuclear y Radiológica ha confirmado que «ningún efectivo radioactivo se ha detectado en Arabia Saudita ni en otros Estados del Golfo».
Por su parte, la Organización de Energía Atómica de Irán ha declarado este domingo que no permitirá que se detenga el desarrollo de su «industria nacional», calificando el ataque como «una violación del derecho internacional».
Horas después, Irán ha lanzado ataques sobre Tel Aviv y Haifa, a lo que Israel ha respondido con una nueva ofensiva en el oeste de Irán. Continúan, por tanto, los ataques cruzados entre ambos países tras más de una semana de conflicto que ha dejado centenares de víctimas en Irán y más de una veintena en Israel.
Israel elogia la operación
Este domingo Trump ha mantenido también una llamada con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, según ha informado un alto funcionario de la Casa Blanca. Estados Unidos también «advirtió a Israel antes de los ataques», ha declarado este funcionario bajo condición de anonimato y recogido por la AFP.
Por su parte, Netanyahu ha realizado un discurso donde ha agradecido a su homólogo estadounidense la operación, que ha calificado de «insuperable». También ha destacado que «su valiente decisión cambiará la historia» y ha asegurado que «la historia registrará que el presidente Trump actuó para negar al régimen más peligroso del mundo, las armas más peligrosas del mundo».
El presidente de Israel, Isaac Herzog, ha comentado, asimismo, en su cuenta de X que se trata de «un momento en que la libertad, la responsabilidad y la seguridad triunfaron».
La comunidad internacional condena los ataques
La decisión de Trump ha generado una ola de condena por parte de la comunidad internacional. Uno de los primeros en pronunciarse ha sido el secretario general de la ONU, António Guterres, quien ha dicho sentirse «gravemente alarmado por el uso de la fuerza de Estados Unidos contra Irán», advirtiendo de que «no hay solución militar» que sustituya a la diplomacia. «Esta peligrosa escalada en una región que ya está en el filo es una amenaza directa a la paz internacional y la seguridad», ha declarado en un comunicado en su cuenta X.
Varios líderes latinoamericanos y congresistas estadounidenses también han expresado su rechazo, calificándolo de agresión ilegal y violación del derecho internacional. El presidente de Bolivia, Luis Arce, y el de Chile, Gabriel Boric, han pedido respeto a la paz y a las normas internacionales, mientras Venezuela lo ha tildado de «acto de agresión ilegal», advirtiendo de graves consecuencias globales.
También la alta representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, ha pedido “a todas las partes” dar “un paso atrás” para evitar una nueva escalada en Oriente Medio y que «vuelvan a la mesa de negociaciones», aunque ha precisado que “no se debe permitir que Irán desarrolle un arma nuclear, ya que supondría una amenaza para la seguridad internacional”.
Mientras, el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, ha dicho en un mensaje en X que EE.UU. ha tomado «medidas» para «mitigar» la amenaza nuclear de Irán y ha calificado de «amenaza grave a la seguridad internacional» el programa nuclear iraní.
Por su parte, la OTAN se ha limitado a señalar que sigue «de cerca» la situación en Oriente Medio. «Le informaremos si tenemos algo más que añadir», ha señalado a EFE un portavoz de la Alianza.